Con los niños de inicial. |
Después de poco, poquísimo tiempo, el Plan Lector se desvirtuó y corrompió. No sólo eso, ahora existen personas que se llenan los bolsillos con el dinero obtenido a través del negocio en el que se ha convertido. Hoy en día vemos como las editoriales que estuvieron desde un principio no cumplen con su propio proyecto, y que las editoriales que se sumaron posteriormente tampoco se interesan en los aspectos serios y decentes del plan.
Los libros de lectura se ofrecen ahora directamente al director y profesores del colegio previo pago de coimas, comisiones, viajes, sorteos de autos, etc. Y los más perjudicados han sido los sectores de menor poder adquisitivo, (C, D, E) pues se obliga a los padres de familia a comprar los libros. “Son obligatorios”, se les informa el momento de la matrícula. Y no se pueden pasar de un alumno a otro, porque cada año se piden títulos diferentes para todos los grados.
¿Cómo es posible todo esto? Un proyecto que empezó como un tierno cuento de hadas termina en manos de lobos y monstruos que se burlan de nuestros niños y de los que tienen menos. Seguramente tiene que ver el hecho de que este proyecto se implementó durante el gobierno aprista, con Alan García la cabeza, uno de los más corruptos de los últimos tiempos.
Desde el principio se sumaron al Plan Lector las editoriales de los amigos de los gobernantes, las de los amigos de sus amigos, y también las de sus familiares. Habían encontrado la fórmula perfecta para robarle al país: se llenan los bolsillos de plata y les dan migajas y libros malos a los niños.
Cualquiera escritor puede participar en el Plan Lector, lo sé de primera mano. Se paga por adelantado (a los medianamente reconocidos hasta 2000 dólares), sin haber entregado siquiera una sola línea. Y esto incluye también a los familiares y amigos de los editores, quienes de improviso se convierten en escritores. Se les pide a estos pseudo escritores que escriban 5 cuentos antes del comienzo del año escolar. No importa la calidad de esos cuentos, solo tener un libro completo que los padres deberán comprar obligatoriamente.
Qué diferente era todo antes: las lecturas las sugería los profesores, maestros más conscientes, interesados en proporcionar una buena educación a sus alumnos (a pesar de estar ellos mismos mal pagados). Los libros de cuentos o novelas uno podía pasarlos a sus hermanos menores, sobrinos, hasta no sé cuantas generaciones. Ahora todos los libros son desechables.
Pero no se trata sólo del Plan Lector. En los textos escolares para otros cursos (Historia, Matemática, Ciencias Naturales) las grandes editoriales (como Santillana) también las editoriales comercian con un afán mercantil, tal vez no premeditado, pero que en los últimos años se les ha escapado de las manos. Como empresas tienen derecho al lucro y a los réditos productivos, pero dos cosas deben funcionar de la mano en el juego de libre mercado (ya sea en libros, ropa, comida): capitalismo y democracia. La idea de obtener réditos económicos debe estar acorde con el respeto del ciudadano.
No está mal que las empresas ganen dinero, el problema es como lo hacen. Pero estas editoriales han terminado, como ya hemos visto en algunos canales de television, convirtiendo este negocio en una estafa. Descubrieron la forma perfecta para evitar que el libro que usó un niño sea usado al año siguiente por otro niño (el hermano menor, el primo o vecino). Para ello cada texto trae un 20% de cambios cada año; además se obliga a realizar las tareas en el mismo texto escolar, que así queda inservible para un nuevo uso. Y todo esto se hace con la complicidad de los directores, profesores y funcionarios del sector, justo aquellos que deberían resguardar la educación de nuestros niños.
Como hemos señalado, en el negociado del Plan Lector están metidas principalmente las grandes editoriales, aquellas que manejan millones y que todos conocemos. Pero también hay un grupo de escritores que regentan todo este mercantilismo, diciendo que aman a los niños y se preocupan por ellos. ¡Nada más falso!
Con los niños de Lima Norte, en una actividad reciente. |
Los seres humanos somos así a veces llenos de caretas, maquillaje, hipocresías, no deseamos pelearnos con el amigo aunque sepamos que está cometiendo un delito. Nadie desea chocar con nadie, por eso nuestro país esta como está. Leo en algunos blogs que apenas y de forma superficial tocan este tema. Claro, porque estarían señalando a algún amigo; pero como no le debo nada a nadie, me pronuncio desde aquí como debe de ser.
Como dice Oscar Wilde: “La ambición es el último refugio del fracaso”. Parece que este negociado a muchos les sirvió y sirve de refugio, y que el amor al dinero es el mal de este tiempo. Así termino este artículo lamentando que todo este proyecto haya terminado en un gran recreo para las editoriales. A ver si las autoridades investigan profundamente este caso y de una buena vez eliminan estos programas que hacen tanto daño a todo el sistema educativo peruano.
He aqui una entrevista interesante con uno de los creadores del Plan Lector.
También han escrito sobre este tema El Comercio, RPP, Ricardo Ayllón, Gustavo Faverón, Lima Norte Noticias, Eduardo Pallarderi, Gabriel Rimachi.
Por último, dejo el video del informe del programa Panorama que ha puesto el tema en el debate.
PS. Después de publicado este artículo, la revista Caretas (17-3-2011) publicó el siguiente informe sobre el tema. Vemos a un viceministro de Educación que recién comienza a preocuparse por el problema. El programa Plan Lector funciona desde el 2006 y él debe saber, mejor que nadie, cuántas y cuáles son las editoriales que negocian con estos libros.
8 comentarios:
Es increible que el Apra con su ministro Chang, al término de su mandato se dé cuenta que existe una mafia en la venta de los libros que choca con la economía del pueblo,sabemos que para ser buen político es carecer de Valores. La educación no debe ser un negocio ni tener tinte político, porque la educación no es como el vino de palacio que tiene la cara de Alán, los libros no debieron tener la cara de Alán
Y los manejos turbios abarcan desde los textos escolares que mecionas hasta las novelas y libros de cuentos del Plan Lector, involucrando a editoriales grandes y pequeñas, escritores conocidos y desconocidos, y autoridades de los colegios estatales y privados. Toda una compleja red de corrupción hecha solamente para perjudicar la economía de los hogares peruanos más humildes. El peor de los delitos.
Que mal que se trafique con la educacion. Como es posible que en los colegios los mismos profesores y los vendedores de libros se pongan de acuerdo para ganar a expensas de los pobres padres de familia que con las justas tienen para pagarle los estudios a sus hijos. La corrupcion no puede alcanzar a los mismos profesores y centros de estudios pues esa misma corrupcion luego sera natural en los alumnos. Tanto se lucha por combatir la corrupcion y no nos damos cuenta que la aprendemos en la escuela donde asistimos a temprana edada. Que pena el Peru debe cambiar! Tanto en el tema de salud donde yo trabajo donde tambien vemos tanta injusticia, trafico de medicinas y olvidos y descuidos, como en la educacion en el Peru! Gracias atte
Maria Teresa Dulanto
Presidenta de la Asociacion Angeles de los Arenales sin fines de lucro.
http://angelesdelosarenales.blogia.com
Buena Maoli te felicito no solo eres una gran artista, sino una persona de primera y me honra ser tu amiga!
Los que han pervertido las buenas intenciones del Plan Lector no han sido ni Chang ni sus compañeros apristas, sino los malos maestros y los malos escritores que vieron su oportunidad para hacer fortuna a costa de los alumnos ofreciéndoles libros de mala calidad, escritas a la diabla. ¿Dónde se ha visto que un escritor que se respete escriba libros como quien hace panes? Estos seudo escritores no piensan en el porvenir, en la gloria, en un posible Nobel, sino en llenarse los bolsillos sin importarles los demás. Estos malos escritores, no sé si deberían de denominarse así, son los que han prostituido el Plan Lector. ¿En qué pensarán cuando se sientan a escribir? ¿En cuántos ejemplares venderán, en si recuperarán su inversión en el primer bimestre o en el segundo?
Gracias, María Teresa. Desde nuestros blogs tenemos que estar unidos aquellos que guardamos la esperanza de ver al Perú viviendo en una verdadera democracia y libre de la corrupción. En especial quienes nos preocupamos por los niños y todas las injusticias que sufren actualmente en nuestro país.
Por supuesto que sí, los oportunistas vieron en este proyecto una manera de hacerse de ganancias rápidamente. Pero también hay responsabilidad del gobierno, sobre todo del ministro de Educación; responsabilidad moral y ética. Todo esto de los negocios oscuros con los libros no es de ahora, se sabe desde hace un buen tiempo. Y un detalle más: los editores actuales reciben a autores que pagan el íntegro de sus publicaciones. En otras palabras, los editores ganan dinero por el pago del autor y además tienen toda la certeza de vender los libros (libros malos, por supuesto) a través del Plan Lector.
Hola, en facebook salió este artículo del escritor Gabriel Rimachi y es del 10 de marzo, ya era hora que aparezcan voces valientes que denuncien este negociado. Felicitaciones señorita Maoli.
http://www.rimachisialer.blogspot.com/
Gracias por el enlace y ya lo incluí en el texto. Es necesario que seamos muchos los que levantemos la voz ante este abuso y que nuestros hijos puedan finalmente acceder a una educación educación más digna y menos onerosa. No debemos dejarnos engañar por el ministro de educación, quien dice que se va a investigar a las editoriales y a los centros educativos. La investigación debería empezar en el propio Ministerio, ya que ellos dieron luz verde a este programa.
Publicar un comentario